La excavación y posterior control arqueológico en la Era del Moro, fue la continuación de la investigación arqueológica que se ha venido realizando en esta zona de la ciudad desde el año 2017. La excavación consistió en la realización de 6 sondeos en diferentes puntos de la parcela, y el control arqueológico se realizó en todos aquellos movimientos de tierra que se realizaron en la propia parcela.
La excavación arqueológica ha puesto de manifiesto, espacios que no aparecen en la cartografía histórica de época contemporánea, lo que indica que a pesar de que la misma da a entender que la zona junto a las murallas en la Era del Moro era un espacio despejado, ocupado únicamente por la Presa de San Isidoro, la realidad era otra.
De época moderna procede una gran cantidad de cerámica vidriada, mucha de ella importada de otros lugares, posiblemente relacionada con la instalación del convento de los Descalzos al otro lado de la muralla.
En la Edad Media esta es una zona de cultivo, incluso por debajo del nivel de cimentación de la propia muralla.
También se ha podido documentar un sistema de cimentación de la muralla de época bajoimperial, que no se conocía hasta el momento. Se trata, como hemos visto, de una plataforma de cantos de río trabados con argamasa en tongadas.
Antes de la instalación de la legio VII, esta zona ya está ocupada por instalaciones artesanales de época de la legio VI.
Equipo de trabajo
Arqueología
→ Fernando Muñoz Villarejo
→ Diego Díaz Alonso
Dron
→ Esperanza Martín Hernández (Dolabra, servicios integrales de arqueología)

