Los trabajos de seguimiento arqueológico en el exterior de las Cuevas Menudas, consistieron en el control arqueológico de los movimientos de tierra allí realizados. Dada la topografía de la zona, dichas labores se hicieron de forma manual, lo que suponía que en el caso de aparecer una evidencia arqueológica, esta se vería de inmediato.
Durante estos trabajos, se tuvo especial precaución cuando bien los rebajes del terreno, bien las pequeñas zapatas de cimentación, se localizaban por debajo de las cotas del suelo de las cuevas. Esto se debe al posible avance de la cueva hacia el exterior y que posteriormente y debido a los desplomes, el suelo original hubiese quedado tapado.
Como se ha señalado la intervención arqueológica se ocupó tanto de los rebajes del terreno, como de las zapatas para la barandilla.
Equipo de trabajo
Arqueología
→ Fernando Muñoz Villarejo
→ Diego Díaz Alonso

